Una mala gestión del proceso de retirada del amianto puede ocasionar perjuicios tanto en la saludo como en el bolsillo.

Problemas de salud

La fabricación e instalación de materiales que contienen amianto está prohibida en España desde el año 2001, ya que su manipulación puede provocar fibrosis pulmonar y cáncer de pulmón. Por ello, es vital que el proceso de desamiantado se realice correctamente y por empresas cualificadas. Esto requiere medidas de seguridad y salud aplicables a los trabajos con riesgo de exposición al amianto. El trabajo de desamiantado, si no se produce con los medios de protección correctos, puede ocasionar graves daños en la salud tanto del trabajador que lo manipula de forma irregular como de terceras personas.

 

Perjuicios económicos

Además, puede conllevar graves sanciones, con cuantías que pueden ascender a los 40.985 euros.